V Semana de Pascua – Sábado
Las razones para la persecución
Pablo llegó luego a Derbe y más tarde a Listra, donde había un discípulo llamado Timoteo …. Pablo quería llevarlo consigo …Así, las Iglesias se consolidaban en la fe, y su número crecía día tras día.Hch 16,1-10
Si el mundo los odia, sepan que antes me ha odiado a mí. Si ustedes fueran del mundo, el mundo los amaría como cosa suya. Pero como no son del mundo, sino que yo los elegí y los saqué de él, él mundo los odia. Acuérdense de lo que les dije: el servidor no es más grande que su señor. Si me persiguieron a mí, también los perseguirán a ustedes; si fueron fieles a mi palabra, también serán fieles a la de ustedes.Jn 15,18-20
La dinámica del grano de trigo, a dar sus frutos, debe morir bajo tierra, viene de la persecución, en los que las comunidades Cristiano crecer en los días de Pablo como en la actualidad. ¿Por qué vivir proclamar el evangelio y es un motivo de persecución? Para ser justos hay una parte del verdadero mensaje del Evangelio que se recibe con la simpatía es el relativo a la justicia social, la fe en la Providencia, sanando a los enfermos, y en general en todo el propuesta del Evangelio donde hay algo para «hacer» o «recibir» dos palabras que reflejan perfectamente la naturaleza humana. Esta parte el evangelio no requiere grandes cambios internos, pero sólo para hacer pequeños cambios en nuestras vidas, mejorar nuestra forma de vida y las personas que se cercano. Es un mensaje que puede ser aceptada o no aceptada pero no un motivo de persecución en particular. Persecución
rompe, sin embargo, cuando el hombre se le pide que cambie sus convicciones internas, que se ha acumulado lentamente con el tiempo y que son los pilares de su existencia. En otras palabras, la persecución se produce cuando propuestas para la auto-negación, porque el hombre se hace para vivir, para avanzar a partir de lo que ya no es para empezar todo de nuevo. Perdonar a los que sufren no nos es humano, ya que no es poner la otra mejilla, y ni es el cambio radical en la manera de vivir, de sentir, de relacionarse con Dios y al prójimo. También estamos de acuerdo creemos en la Providencia, porque esto nos permite aumentar la lo que tenemos, pero no estamos en el caso de la rendición a ella como las aves del cielo y los lirios del campo, renunciar por completo a nuestra seguridad. Es fácil, por último, para un cristiano hablar de justicia social, pero pocos os que se aplican y menos aún que viven en radicalmente. Esta segunda parte del mensaje del Evangelio es
Debido a la persecución, y el Apóstol tratado de mantenerse alejado.